Every day health professionals have to make dozens of decisions regarding patient care and management. It is not easy to integrate scientific evidence in this process. The primary ability we need in order to achieve successful results is learning how to recognize the circumstances in which evidence arising from results of scientific trials may help.
Todos los días, los profesionales de la salud nos vemos enfrentados a decenas de decisiones respecto del cuidado que ofrecemos a nuestros pacientes. Incorporar la evidencia científica en nuestro proceso de decisión no es algo fácil, y la primera habilidad que necesitamos para un resultado exitoso es aprender a reconocer las circunstancias en que la evidencia de estudios científicos puede ser de ayuda.